Costa Quebrada es un enclave natural que se extiende a lo largo de la costa cantábrica, ofreciendo un paisaje de acantilados escarpados y formaciones rocosas que desafían el tiempo. Este rincón de Cantabria es un refugio para los amantes de la naturaleza, donde el mar y la tierra se entrelazan en un espectáculo visual que invita a la contemplación y la aventura. Desde sus senderos, se puede sentir…
Costa Quebrada es un enclave natural que se extiende a lo largo de la costa cantábrica, ofreciendo un paisaje de acantilados escarpados y formaciones rocosas que desafían el tiempo. Este rincón de Cantabria es un refugio para los amantes de la naturaleza, donde el mar y la tierra se entrelazan en un espectáculo visual que invita a la contemplación y la aventura. Desde sus senderos, se puede sentir la brisa marina acariciando el rostro mientras se exploran sus secretos geológicos y se disfruta de la biodiversidad que habita en sus rincones.
Ubicación
Información práctica - Costa Quebrada
Cómo llegar
Información sobre cómo llegar al destino
Para llegar a Costa Quebrada, puedes tomar la carretera CA-231 desde Santander, que te llevará directamente a la costa en unos 20 minutos. Si prefieres el transporte público, hay autobuses que conectan Santander con localidades cercanas como Liencres, desde donde puedes caminar hasta la costa.
Información del área
Información general del área
Costa Quebrada cuenta con varios senderos señalizados que permiten explorar sus paisajes. No hay centros de visitantes, pero la información está disponible en línea y en las oficinas de turismo locales.
Geografía
Geografía y características del terreno
Costa Quebrada se extiende a lo largo de la costa cantábrica, caracterizada por sus acantilados escarpados y formaciones rocosas únicas. La región se encuentra al oeste de Santander, en la comunidad autónoma de Cantabria.
Flora y fauna
Flora y fauna del destino
La biodiversidad en Costa Quebrada es rica, con especies de aves marinas como gaviotas y cormoranes. La vegetación costera incluye plantas adaptadas a las condiciones salinas, como el hinojo marino.